Altas exigencias, perfectamente resueltas

El TTRS 8S con filtro de partículas de gasolina (OPF) nos planteó un complejo reto técnico. El objetivo era conservar plenamente la emoción y las prestaciones incomparables del modelo predecesor sin OPF a pesar de las normativas de emisiones más estrictas. Mediante enfoques innovadores en el sistema de escape, un ajuste preciso del software y el uso selectivo de materiales de alta calidad, pudimos lograr un equilibrio óptimo entre prestaciones, sonido y normativa medioambiental. Para ello fue decisiva nuestra experiencia en el campo de la construcción de sistemas de escape y la mejora del rendimiento. Todos los componentes, desde el sistema de escape y el turbocompresor hasta el software de control, se fabrican y prueban en Alemania. Este control total garantiza la más alta calidad, la máxima estabilidad y una puesta a punto precisa que se mantiene constante incluso en condiciones extremas. Con el TTRS 8S OPF, combinamos un rendimiento sin concesiones con una auténtica sensación de competición, made in Germany.